1/31/2020
La creciente preocupación de los consumidores por su salud empieza a jugar un importante papel en la estrategia de las grandes compañías del sector de refrescos.
Los datos referentes a las ventas del ejercicio pasado recientemente presentados por Coca Cola España ponen de manifiesto que seis de cada diez bebidas comercializadas por la empresa en nuestro país en 2019 han sido bajas en calorías o directamente sin ellas. Los refrescos sin azúcares han supuesto un 41% del total de las ventas, porcentaje que supera en 9 puntos la cifra de 2018, lo que demuestra que esta tendencia del mercado cada vez marca más la evolución del sector. En el caso de la histórica firma, es evidente que Coca Cola ha apostado de forma decidida por las bebidas sin azúcares o con menores cantidades de este tipo de ingredientes, estrategia que, si tenemos que atenernos a los resultados globales, ha demostrado ser todo un acierto.
El crecimiento neto orgánico en todo el mundo durante 2019 ha sido del 9%, llegando hasta un 16% en el último cuatrimestre, y los ingresos de la compañía han aumentado un 10%, tal y como refleja el informe financiero que se acaba de hacer público. En el documento, Coca Cola destaca el crecimiento de su gama de bebidas: los nuevos sabores, como la versión con café de su producto estrella, han contribuido de forma considerable al incremento en un 6 % del valor de la marca durante el último año. Pero es precisamente la versión sin azúcar la que mantiene crecimientos sostenidos de dos dígitos.
Asimismo, es preciso tener en cuenta que todas las variedades de Fanta, a excepción de la de fresa, se consideran bajas en calorías pues a raíz de su reformulación su contenido total en azúcares añadidos es inferior a 4,5 gramos por cada 100 ml, o, lo que es lo mismo, inferior a 20 kcal. Desde 2014 los sabores de naranja y limón, los más populares, han reducido los azúcares en un 65,4% y 66,8%, respectivamente, reducción que se ha realizado también en otras marcas, como Aquarius. Considerando el total de litros de refresco vendidos, el contenido total de azúcares se ha reducido en los últimos tres años en un 18 %, lo que se debe, por un lado, al auge de las bebidas sin azúcar, y a las reformulaciones de los productos, por otro. Extendiendo el análisis a las últimas dos décadas la reducción es aún mayor y alcanza el 50%, hecho sin duda debido a la aparición de las opciones Zero y Light. En la actualidad, 119 de las 282 referencias con que cuentan sus marcas carecen de azúcares añadidos.
Productos funcionales y ecológicos y formatos más pequeños
En el marco de otra de las apuestas del gigante de los refrescos, consistente en ofrecer bebidas de todo tipo, destacan los productos funcionales y ecológicos, como la gama Honest, que es, de hecho, la única que no cuenta con variedades específicas sin azúcares al estar formada por bebidas ecológicas. Y tampoco hay que olvidarse del lanzamiento de Aquarius Raygo, bebida funcional con vitaminas y minerales añadidos formulada con extractos de raíces.
Por último, la introducción de formatos más pequeños, como las latas de 200 ml frente a las tradicionales de 333, cuya presencia en hostelería y vending ha aumentado de forma considerable el año pasado, se presenta también como una ayuda para minimizar el consumo de azúcares muy relacionada, además, con otra de las líneas trazadas por la compañía, la sostenibilidad a través de la innovación en los envases.
La IA abre un nuevo mundo de posibilidades, en muchos casos inimaginables hasta hace bien poco, en los diferentes procesos de gestión de las máquinas expendedoras.
Este tipo de establecimientos combina la tradicional experiencia de compra con la venta a través de máquinas de vending.
A partir de la pandemia de COVID-19, y la conveniencia de pasar más tiempo en casa, la ingesta de este tipo de alimentos ha crecido de forma considerable.